miércoles, 2 de noviembre de 2011

Tráfico né! Más que un plagueo, una realidad

Para nadie es una sorpresa que el caos vehicular en este país es cosa de todos los días. La famosa “hora pico” ha perdido vigencia… anteriormente el horario pesado, en lo que respecta al tráfico, eran a las 7:00, a las 12:00 del medio día y a las 18:00, hora en que por lo general culmina la jornada laboral. Actualmente eso ha quedado atrás, la “hora pico” abarca de 7:00 a 19:00, si no es más. 

La inmensa cantidad de vehículos que circulan en el departamento central es sin duda inexplicable, sobrepasan las carreteras disponibles para ser transitadas. La facilidad a la hora de comprar los automóviles como también las motocicletas contribuye a que vaya creciendo esta ola imparable de vehículos. La falta de calles alternativas favorece  a que las autopistas principales colapsen.
Los ómnibus o automóviles que se descomponen por falta de mantenimiento y terminan varados en las avenidas, generando inconvenientes para transitar; son a su vez uno de los innumerables problemas que se vive día a día, al menos en la ciudad capitalina y sus alrededores.

La salida de camiones de carga en horarios inoportunos se vuelve un verdadero tormento para los conductores particulares, pues, los primeros, ocupan mucho espacio en las calles y se pierde más tiempo de lo debido.

Las motocicletas aunque sean más pequeñas, también ocupan espacios en las calles pues, se toma una distancia prudencial de ellas como si fuesen automóviles; que en realidad es lo correcto pero también es bien cierto que eso hace más lento la circulación.
La duración de los semáforos, creo debería de prolongarse, por lo menos de los lados en que el tráfico es superior. A demás en el momento en que el semáforo da luz verde los primeros vehículos en la fila tardan unos cuantos segundos en movilizarse; la razón no lo sé, falta de atención, lentitud, razones de mecánica, no tengo idea. Es como una cuestión de “reacción tardía”.

Cuando el semáforo no abastece, la policía de transito tiene que tomar cartas en el asunto y agilizar el tránsito.

La falta de educación de los pasajeros como también de los conductores, es sin duda un problema gravísimo, que no siempre es tenido en cuenta. La mala costumbre de los usuarios de los transportes públicos de hacer la “para” en lugares que no corresponden y que a la vez los conductores se detengan a recogerlos o bajarlos fuera de las paradas establecidas de antemano.  Respetar las paradas sería interesante.

Las mejores soluciones para acabar con esta problemática diaria seria la construcción de unos viaductos en las Avdas. Mcal. López y San Martín, y en Madame Lynch y Autopista que son unas de las más necesitadas de manera urgente. Aunque sabemos que la construcción de viaductos generaría perdidas para las empresas que tienen intereses en las cuatro puntas,  y por ello, quizás, un sueño posiblemente utópico.
Otra interesante opción es habilitar calles alternativas para que se cuente con más opciones, para lograr así también disminuir en gran medida el trafico caótico que es nuestro pan de cada día.

La otra cara de la moneda

No todos  desean la existencia de unos viaductos, pues los vendedores de frutas que se sitúan en los semáforos encuentran eso como quitarles a ellos el sustento diario.
“Nosotros vivimos gracias al tráfico y el semáforo, si se hace un viaducto acá (Avda. Madame Lynch) cómo le vamos a mantener a nuestros hijos”, manifestó su preocupación uno de los vendedores de esa zona.
Lo que para algunos es la solución, para otros es un problema.

material de apoyo del tráfico en la Avda. San Martin: http://www.youtube.com/watch?v=SNpbQEaFwzc


No hay comentarios:

Publicar un comentario